¿Por qué casi nunca decimos lo que realmente pensamos?
Qué tan seguido realmente expresamos lo que opinamos? En el trabajo? En la familia? Con la pareja? Otros ambientes?
Las personas no se van a expresar sinceramente a menos que sientan la confianza para hacerlo.
Cualquiera que sea el contexto, es importante crear el espacio, y hasta la cultura, de comunicarnos sinceramente, sin juzgar. En el mediano y largo tiempo es la mejor opción.
Para eso hay que estar abierto a escuchar. No necesariamente se tiene que encontrar la solución a la situación de inmediato, con sólo poderse expresar y sentirse escuchado ya se está encaminando por buena dirección.
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